Hay sueños y sueños, si con el corazón se sueña, con el corazón se logra, solo hay que proponérselo. No, no es fácil, lo sé por experiencia. El problema es nuestro, no sabemos manejar los sueños con el corazón. Eso es lo más difícil. Cuando logremos sincronizar los sueños con el corazón, con el verdadero amor; como por arte de magia los sueños se volverán realidad. Ojo! A veces nos puede costar una vida. Es cuestión de sincronicidad. Llegar a manejarla es lo maravilloso.