En este blog encontrarán pensamientos, ensayos, poemas, pero fundamentalmente mucho, mucho sentimiento.
No soy escritor ni poeta, solo escribo lo que siento, lo que me hace latir más fuerte el corazón, lo que me genera alegrías y también tristezas, lo que me da vida y deseos.
Pero hay algo fundamental que quiero que sepan. Nada tienen que ver estos escritos con una realidad concreta, lo escrito está dedicado a la vida, al amor y no a un ser determinado, eso lo dejo librado a vuestra imaginación.
Lo que ustedes leerán aquí lo quiero dedicar y compartir con todos aquellos que tengan la sensibilidad de comprender estas simples palabras pensadas por una persona que no se ha preparado para esto, pero sí un día quiso visualizar el amor a través de la escritura.
Eduardo Pocai
Este poema fue escrito por mi amado padre hace alrededor de unos 19 años, o tal vez más. El falleció el 27 de agosto de 2003. Sus últimas palabras fueron vertidas a un querido primo que tuvo la suerte, o la mala suerte, de ser el único que estuvo presente cuando falleció.- Le dijo: Quiero que mi hijo sea feliz- Gracias querido viejo, la felicidad me la dan mis hijos y mis amadas nietitas. Con este poema que vos escribiste quiero homenajearte en estos tantos años de ausencia. Gracias querido viejo, Pochito querido ¡cuanto te extraño! gracias por todo lo que hiciste por mi y el amor que me diste y me enseñaste a profesar. leer todo
La luz se refleja sobre lo húmedo de su piel Que apasionado, beso, tratando de sofocar tanto estupor y excitación. leer todo
“Como no ha de ser bella Ushuaia si cuando navegas por su canal los lobos marinos disponen brindarte un ballet acuático en tu homenaje y los cormoranes te muestran sus ojos de un color que copiaron del cielo y las aguas.” Lo que sigue es un homenaje a mi padre; Pocho Pocai Todo lo que está en negrita pertenece a un poema que él le escribió a su amada Ushuaia. Gracias querido Papá, por tanto amor y comprensión. leer todo
Este poema o ensayo, en realidad es una canción que escribí junto a un amigo mío, Enrique Olivero. Teníamos jóvenes 17 años cuando escribimos parte de esta letra. Con el tiempo, y a raíz de historias soñadas de estos últimos años, me tomé el atrevimiento de modificarle sustancialmente la letra para adaptarla a una actualidad soñada. leer todo
Este es un poema que me envió un querido primo hermano que suele disfrutar de los paisajes de nuestra amada Ushuaia a través de mis fotografías. Muchas gracias querido Pablo. leer todo